Cuánto me enternece la seriedad con que toman este sencillo momento, donde la unión reconocida por la civilidad otorgará ciertas garantías, donde el amor simplemente no basta, donde los sueños y el compromiso de sangre no bastan, donde la mirada generosa de los que te protegen no basta. Entrarán de la mano a su hogar, a mi vientre torneado por sus figuras y reirán complacidos, porque el contrato -al final- no importa tanto...

No hay comentarios: